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popular; y "mantener vivo, animoso, vigilante ese principio y su acción, a fin de ejercitarlo siempre en bien del pueblo". Además de ello, que era el elemento central de su programa, sustentaba las ideas liberales comunes en aquella época. "No acepta, decía uno de sus panegíricos, ni el credo conservador ni acepta el credo radical".

Su directiva quedó formada con don José Santos Ossa como Presidente; y los señores Federico Valdés Vicuña y Domingo del Solar como secretario.

Dados los hábitos políticos de la época, Vicuña Mackenna quiso dar a su candidatura una garantía de éxito y pidió personalmente al Presidente de la República don Federico Errázuriz una definición acerca de la actitud del Gobierno. El Presidente le habría asegurado la prescindencia gubernativa y que no habría candidato oficial. Luego de esta entrevista, Vicuña Mackenna difundió lo conversado, con lo cual se atrajo más partidarios aún. "He hablado con toda franqueza con el Presidente y con todos y cada uno de sus Ministros, decía en una circular, de modo que puedo proceder autorizado por ellos a presentar desde luego mi candidatura a la Presidencia de la República.... No soy, no seré ni puedo ser candidato oficial. Nadie lo será tampoco..." El camino, pues, estaba despejado para Vicuña Mackenna y para el nuevo Partido Liberal Democrático. Si el gobierno no tenía candidato oficial, no podía dudarse de su triunfo.

Vicuña Mackenna renunció a la Intendencia de Santiago con fecha 20 de Abril de 1875; y desde entonces se dedicó de lleno a sus trabajos electorales. Su campaña tuvo caracteres no conocidos hasta entonces y prendió en las provincias, en los elementos populares y, especialmente en la clase media. Los meetings, los desfiles, los banquetes, las giras, se sucedían unos a otros, en medio de gran entusiasmo popular. El Partido Liberal Democrático fué adquiriendo cada vez más caracter popular y, naturalmente, esto la concitó la malquerencia de elementos aristocráticos de la capital y, paradojalmente, del Partido Radical. Llegó un momento en que se atacó desembozadamente a la "oligarquía", no obstante la extracción social del propio candidato. "Estamos aquí, dijo uno de sus partidarios, para "defender los derechos del pueblo contra las intrigas oligárquicas de unos pocos hombres que en el país querían constituirse en dueños absolutos de sus destinos"

El 7 de Mayo, lanzó Vicuña Mackenna un manifiesto al país, en el cual señalaba los puntos de su programa, que habrían de incorporarse luego al