Señor,
"El juramento sagrado que acabo de prestar en calidad de presidente de Colombia, es para mí un pacto de conciencia, que multiplica mis deberes de sumision á la ley, y á la pátria. Solo un profundo respeto por la voluntad soberana me obligaría á someterme al formidable peso de la suprema magistratura. La gratitud que debo á los representantes del pueblo, me impone ademas la agradable obligacion de continuar mis servicios por defender con mis bienes, con mi sangre, y con mi honor, ésta Constitucion, que encierra los derechos de los pueblos hermanos, ligados por la libertad, por el bien, y por la gloria. La Constitucion de Colombia verá junto con la independencia el ara santa en la cual haré los sacrificios. Por ella marcharé á las estremidades de Colombia á romper las cadenas de los hijos del Ecuador, á convidarlos con Colombia despues de hacerlos libres.
Señor: espero que me autoriceis para unir con los vínculos de la beneficencia á los pueblos que la natu-