Cristianismo, á causa de no haber sido instruidas de un modo conveniente en las excelencias que encierra; y sea efecto de su vida, selvática, ó de los instintos de raza que conserva, acostumbra á entregarse á los placeres sensuales que su ardiente naturaleza requiere.
El tipo de la india es parecido á todos los de su índole que existen en la América Meridional, y aun que se notan algunas pequeñas variedades en las líneas que demarcan su rostro, no obstante tiene la misma expresión gráfica: color cobrizo, estatura mediana, miembros robustos, pómulos algo salientes, boca grande, el labio superior arqueado, nariz algo aplastada, ojos no muy abiertos y los cabellos abundantes, negros y lacios.
Concluiremos la reseña de la india colombiana, haciendo mención de sus sentimientos exaltados por el espíritu de venganza ó por el amor á su hogar, que defiende como una fiera, en el caso de verse atacada.
Aun viven los recuerdos de los hechos heróicos y terribles que consumaron los indios en los primeros años de la lucha que empeñaron en sostenimiento de su independencia, y en los que tomaron una parte tan activa aquellas mujeres, que revelan grande afecto á los principios que concedo una amplia libertad.
Nos hallamos en la bella y culta Bogotá.
