Página:Historia de las Indias (Tomo II).djvu/442

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
428
Historia

CAPÍTULO CLXX.


Partido de allí del Cahay, donde le tomaron la barca con sus navíos, Hojeda, Francisco Roldan, como hombre astuto, diligente y de guerra, estúvose por allí algunos dias hasta ver si volvia á hacer algun salto Hojeda en la tierra, porque cognoscia dél que era hombre para hacerlo, y desde á pocos dias recibió aviso que habia saltado en cierta parte, la costa abajo, creo yo, donde procuró de hacer pan para su camino. Escribiólo Roldan luego al Almirante, y determina de ir á prenderle, y apareja seis canoas, en las cuales dijo que podian caber 80 hombres; y, porque envió dos mancebos hábiles y sueltos en una canoa por la mar para espiar y especular lo cierto dello, y vide otras cartas de Roldan para el Almirante, escritas despues, luego, desto, y no hacian mencion de la estada de Hojeda, estimo que debia de ser ya ido cuando llegaron los mancebos. Con este favor de haber echado á Hojeda de la tierra, dijeron algunos, ó los más que allí estaban, á Francisco Roldan, que se querian allí avecindar; Roldan les dijo que se escribiesen y que enviaria al Almirante la memoria, y enviaria quien les repartiese las tierras en que hobiesen de labrar, y porque se les hacia grave esperar tanto, señálales él á cada uno en que labrase, como si aquellas tierras no tuvieran dueños; y ¡ojalá aquí parara la tiranía! Pidiéronle más, porque ellos no entendian abajar el lomo, que les diese quien les ayudase á labrar; él, viendo, dice él, que era bien contentarlos, díjoles que queria hacer con ellos una liberalidad, conviene á saber, que el Almirante le habia hecho merced de que el rey Behechio con toda su gente le sirviesen de las cosas de sus labores, y no á otro ninguno, que los tomasen ellos y se sirviesen dellos en sus labores y los contentasen: estas son palabras