Página:JM Gorriti Panoramas de la vida 2.djvu/291

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida

NUESTRA SEÑORA DF LOS DESAMPARADOS 291

En tanto el capitan, cada dia mas encenagado en sus vicios repartia entre la orgía y el juego el tiempo que las ocupaciones de cuartel le dejaban libre, sin acordarse para nada de sus deberes de esposo y padre de familia; ó si los recordaba, era para decirse que siendo su mujer buena y laboriosa, nada faltaria en su casa, por mas que él derrochara.

Un dia de pago en el regimiento, Rogerio se dirigia al cuartel llevando consigo el haber de su compañía.

Al atravesar el cuerpo de guardia, encontróse con el teniente Astolfo, jóven calavera como él y compañero suyo de libertinage.

—Acabaras de llegar !—exclamó este—Pero ..... —añadió palpándole la escarcela—tienes dinero? Oh! he ahí el mágico metal, que se encarga de responder con su armonioso ruido!

—Es el pré de mis soldados.

—¿Y el tuyo?

Elmio! Ya sabes que está pasando cuarteles de invierno en las arcas del judio Isaac.

—Ah!.....¿Y no seria posible sacar algo mas á ese destreido?

—Como no sea un mandamiento de prision que cargue conmigo á chirona.

Y de otro lado!

Si estoy como una patena. Todo ha pasado por esa criba.