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en busca de un yerbal, se darán cuenta de lo que significa penetrar en tales sitios. Pero en cambio, en esa entre- lazada vegetación vive muy a su gusto una tan variada como numerosa población de animales, que en verdad no podían haber elegido sitio más apropiado, seguro y resguardado.
Hay árboles tan enorn.es, así en altura como en diáme-
Un obraje en el Chaco.
tro, que tres o cuatro hombres, asidos de las manos, no alcanzan a abrazar su tronco.
¡Y qué innumerable variedad de especies encierran esos grandiosos bosques! Además de todas las peculiares a otros países, se encuentra en ellos muchísimas variedades indígenas, es decir, pertenecientes exclusivamente a nues- tra flora. :
De entre estos árboles seguramente muchos de ustedes conocerán el quebracho, cuya madera es tan dura y resis-