Página:Manojo de guarias.djvu/15

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido validada

gentes de alto rango literario y de fama mundial. Y si bien no haré una filigrana de arte como la harían Darío, Argüello, Ugarte, Rodó, etcétera, sí le haré algo que huela a lo que huele la tierra cuando la mojan los primeros aguaceros, que sepa a chocolate en jícara y a bizcocho recién horneado, algo, en fin, que tenga sabor nacional. Su obra le dará fama por allá en el extranjero, —aquí nó— ya puede suponerlo. Y yo aprovecharé la oportunidad para ir en ancas de su Pegaso, a darme una escapadita y demostrar fuera de aquí algo del “tiquismo” agudo de que vivo poseído.

Yo creo que todos estamos obligados a poner un granito de arena para construir el edificio de la literatura nacional, del cual apenas asoman los cimientos. Los éxitos de Aquileo con sus Concherías, de doña María de Tinoco con la novela Zulay y de Ricardo Fernández Guardia con los Cuentos Ticos deberían ser estímulo suficiente para sacudir de su apatía a nuestra juventud y empujar una joven falange de mineros a los ricos filones del Folk-lore costarricense, de la vida de la conquista y de los primeros años de la República, de los cuales puede obtenerse excelente material.

Termine, pues, su libro, y ya veremos la manera de editarlo, que será el gran problema para Ud., que no es rico. Estoy seguro que habrá muchas gentes dispuestas a contribuir para la edición, porque aunque parece que vivimos permanentemente aplastados por la “Losa de los sueños”, hay una pequeña minoría

6