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Pero como el desarrollo y aplicación de éstas es diferente según los individuos, de aquí que cada uno tenga derecho á condiciones especiales, apropiadas al grado de cultura y modo peculiar de su actividad. El hombre que cultiva las ciencias exige otras condicio- nes que el que labra la tierra.
Finalmente existe igual dignidad en las diversas ramas de actividad social. Todas las industrias y pro- fesiones tienen derecho al respeto común, ninguna puede ser degradada ni envilecida. Para conservar el orden y la a monia no hay necesidad de gerarquias, sino de enlace y subordinación reciproca.
La igualdad consiste, por tanto, no en la partición matemática de todos los medios sociales, sino en la igualdad ante la ley natural, esto es: identidad de derechos á la dignidad y condiciones necesarias para nuestro fin, proporcionalidad según la respectiva capacidad y mérito.
62. Doctrinas acerca de la igualdad —Cuatro doctrinas principales explican la desigualdad como un hecho necesario:
L La que pretende hallar su origen en la natura- leza misma del hombre, remonta desde Aristóteles: Cuando uno es inferior ásus semejantes, dice, como el cuerpo al alma, es esclavo por naturaleza, como lo son aquellos en quienes el empleo de la fuerza cor- poral esel mejor partido que de su sér puede sacarse