Página:Mis últimas tradiciones peruanas y Cachivachería (1906).pdf/398

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida


Vé que, de hacerlo así, de polo á polo
irá tu insigne nombre, y en el suyo
Hispalis te pondrá una estatua de oro.

El orgulloso resentimiento, la vanidad herida, son implacables. El Asistente se mantuvo inflexible, y el poeta Alvarez pereció en público y afrentoso cadalso. ¡Homo, humus; fama, fumus; finis, cinis!

En cuanto á los versos de cabo roto, de que él fué el inventor, á pesar del empeño de Cervantes por popularizarlos, puede decirse que no han hecho ni harán fortuna. Nacieron con desgracia.