156 HUMBERTO SALVADOR
y otra vez, hasta que queden en libertad todos los contenidos anímicos reprimidos.
La resistencia es muy diversa en sus manifestaciones y muy diferente en su fuerza. A veces se alza contra las normas fun- damentales del psicoanálisis. Otras, parece radicarse en lo in- telectual, como crítica del análisis. Lo mismo puede manifes- tarse como silencio tenaz que como torrente animador de pa- labras que, al parecer, salen al encuentro del analista, y tras de las cuales el sujeto esquiva los propósitos del análisis.
Puede presantarse en la forma de escrupulosidad y duda.
“El neurópata persigue un sentimiento de seguridad”, dice Adler. Se siente débil. Busca en el médico la imagen de pro- tección, como antaño buscó en el padre del sexo opuesto. Es- ta busca viene disfrazada, es inconsciente, pero existe. Cuando es adhesión hacia el médico, se presenta el caso de la trams- ferencia positiva; si es repulsa hacia él, surge el fenómeno de la transferencia negativa.
La transferencia en conjunto es, dinámicamente, la base de la curación psicoanalítica, ya que ésta depende, en forma esen- cial, del correcto manejo de aquélla.
Los primeros estudios de la transferencia fueron hechos por Freud y Ferenczi. Freud explica como el empleo del ensueño puede ayudar al médico a estudiar la transferencia. “El ensue- ño —dice Stekel—-es un mundo microscópico, que reproduce en miniatura todo el mundo psíquico”. Todas las personas, en el universo, son muy parecidas las unas a las otras en lo in- consciente que representa una recapitulación filogenética de millones de años: este fenómeno es universal; está más o me- nos a la par en los seres humanos. “Quieres conocerte a ti mismo, conoce a los demás; quieres conocer a los demás, co- nócete a ti mismo”, —decía el poeta alemán Schiller—, otro de los grandes precursores del psicoanálisis.
Y Waldo Frank, añade: “Sólo conocemos a los demás, en la medida en que nos conocemos a nosotros mismos”.
La transferencia, lo mismo en su forma positiva que en la negativa, puede también ser base de la resistencia. Por lo ge- neral, al empezar un nuevo tema, la resistencia aumenta en el análisis, hasta llegar a un punto desde el cual va descen- diendo, poco a poco, después de haber llegado al máximum.
La transferencia da lugar a que el paciente confiese al mé- dico cuántos pensamientos se le ocurran, ya que el enfermo
