Esta página ha sido corregida
141
ELPOZO
Al contrario te reias i con los ojos me dabas el sí.
—Creí lo decias por broma.
Una forzada sonrisa vagó por los labios del galan i en tono de doloroso reproche contestó:
—¡Broma! ¡Mira aunque se rian de mi porque me caso a fardo cerrado, dí una palabra i ahora mismo voi a buscar el cura para que nos eche las bendiciones.
Rosa, cuya impaciencia i fastidio habian ido en aumento, por toda respuesta se inclinó, tomó el balde i dió un paso hácia la puerta. El mozo se interpuso i con tono sombrio i resuelto esclamó:
—No te irás de aquí miéntras no me digas por qué has cambiado de ese modo!
—Nada tengo que decirte i si no me dejas pasar, grito i llamo a mi madre.
Una oleada de sangre coloreó el pálido rostro del muchacho, un relámpago brotó