86 CIENCIA Y ACCIÓN
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Hemos insistido sobre la cuestión relativa á los cursos de adolescentes y á las lecturas populares porque son quizás entre las instituciones post- escolares las que desempeñan hoy día el papel más importante en la labor encaminada á la con- quista del alma femenina. Pero hay que decir también algunas palabras acerca de otras dos, cuya influencia es grandísima sobre las párvulas y sobre las niñas que han adquirido en la escuela la instrucción primaria. Lo haremos brevemente, porque en otras obras hemos tratado estas cues- tiones con toc.a la amplitud que requieren.
Estas instituciones que tanto influyen en el es- píritu de las niñas son la mutualidad escolar y las “asociaciones amigables, de antiguas discípu- las de la escuela laica.
Las asociaciones de mutualidad escolar fun- cionan de una manera muy sencilla. Prescindien- do de ciertos detalles de organización, podemos decir que se hallan constituídas por los discípulos (niños y niñas) de las escuelas laicas, pudiendo formar parte de ellas desde la edad de tres años. Estos jóvenes societarios—ó mejor dicho sus pa- dres—contribuyen con la cantidad de diez cénti- mos semanales, que entregan al profesor ó pro- fesora, de los cuales cinco céntimos van á parar á la caja de la Sociedad para formar un fondo co- mún, y los otros cinco, para una libreta personal, que es propiedad particular del asociado.
El fondo común, según F. Buisson (1), es pro- piamente el fondo de socorros mutuos, con el cual la Sociedad acude en auxilio de la familia en
(1) V. le Siécle de 4 de Febrero de 1899.
