El trabajo en el sector hortícola de La Plata” ROBERTO RINGUELET Y MARCELA TOMÁS La situación regional plazo, la historia regional muestra sus propias fluctuaciones. En el país hubo un decrecimiento en la cifra global de trabajadores agrarios con una tasa negativa, entre 1947 y 1980 del 0,76% (Ekboin y Otros, 1990); en la región considerada la índole de la producción derivó en el período en una menortecni■cación relativa y en un uso intensivo de mano de obra que, junto a la expansión de los cultivos, confluyeron en dar un per■l de la demanda inverso a la expresión nacional. Sin emb: rgo, desde entonces y acorde a la crisis específica del sectorque se fue desarrollando y la posteriorintegración respecto de los condicionantes agrarios nacionales, la situación laboral regional fue cambiando significativamente (ver nuestro capítulo introductorio y aquellos de Archenti, Ringuelet y Garat, Selis y Simonatto). Al momento, no podríamos hacer un diagnóstico claro sobre los cambios en la demanda. Por un lado, el trabajo en invemáculo requiere genéricamente por lo menos el doble de fuerza de trabajo; pero, a su vez, se podría esperar en el futuro una reducción fuerte en las extensiones de cultivo a campo (con menos productividad) provocando una reducción en la demanda. Asimismo, habría dos transformaciones cualitativas: Una de ellas, es el cambio proporcional deformas de trabajo privilegiando las fonnas salariales a medida que aumenta la acumu- lación capitalista. Otra, el aumento proporcional de trabajo cali■cado. En el marco de la presentación hecha en la Introducción de los tipos de establecimientos hortícolas, cuando analizamos las cifras de la encuesta provincial (Archenti, Ringuelet y Salva, 1993), constatamos un subregistro acentuado de mano de obra. Si bien la cantidad de medieros podía ser creíble (529), no se registraron los familiares que por lo menos triplicaría la cifra. También aproximada podía ser la cantidad de productores y familiares (1.105 ) y mucho menos la de asalariados ■jos 9270 y transitorios (230). 91 Si bien existen pautas generales de la demanda nacional de trabajo a largo
