Súplica al Eterno Padre
Hecha la señal de la Cruz y el Acto de Contriccion harás al Eterno Padre la siguiente súplica.
Benignísimo Dios de infinita caridad, que tanto amasteis á los hombres, que les disteis en vuestro Unigénito la mejor prenda de vuestro amor, para que hecho hombre en las entrañas de una Vírgen, naciese en un pesebre para nuestra salud y remedio, yo en nombre de todos los mortales os doi infinitas gracias por tan soberano beneficio; y en retorno os ofrezco la pobreza, humildad y demas virtudes de vuestro hijo humanado; suplicándoos por sus divinos méritos, por la incomodidad con que nació, y por las tiernas lágrimas que derramó en el pesebre, que dispongais nuestros corazones con humildad profunda, con amor encendido, con total desprecio de todo lo terreno, para que mi Jesus recien nacido, tenga en ellos su cuna, y more eternamente. Amén.
Salúdese tres veces a la Trinidad Beatísima con el verso de Gloria Patri.