Agua Quemada simboliza lucha interna de los opuestos complementarios, igual que la batalla florida. Pero de una manera más universal y cósmica. No así la batalla florida, que es una acción íntima y personal de cada guerrero, que tiene que ver con su “micro universo”, en donde la inercia de la materia conduce a la destrucción o corrupción del ser humano, en la medida que no pueda vencer los elementos que lo degradan o corrompen.
El mundo y el universo están regidos por las leyes universales del Espíritu. La lucha dialéctica del par de opuestos complementarios se vive todos los días y segundo a segundo en todo el universo. El día y la noche, la muerte y la vida, el ciclo cósmico de Venus,[1] el mismo drama universal. En este sentido el universo y el ser humano están compartiendo el mismo desafío existencial. Razón por la cual se entiende la misión que los “macehuales”, los merecidos del sacrifico de los dioses, tienen que coadyuvar no sólo para el sostenimiento del Quinto Sol, sino también para su humanización. Agua Quemada es fundamentalmente un símbolo filosófico.
La Toltecáyotl.
Los antiguos mexicanos llamaron Toltecáyotl, al conjunto de saberes y conocimientos de los toltecas. La Toltecáyotl seguramente se inició con la domesticación de las plantas, la agricultura y la invención del maíz hace ocho mil años y ha venido evolucionado y decantándose con los siglos. A pesar de que los conquistadores de ayer y los colonizadores de hoy, han querido negarle toda capacidad y valor intelectual a los pueblos originarios y a los hijos de los hijos de los Viejos Abuelos, la sabiduría sigue viva y se ha sabido mantener agazapada estos últimos cinco siglos en la cultura popular. Mucha de esta sabiduría tiene orígenes remotos y aunque no la entendamos, vivimos con ella y es ésta sutil cualidad, que nos hace ser diferentes a otros pueblos y nos da ese “toque” del ser mexicano. Es lo que nos da “Rostro y corazón propio”.
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- ↑ Una época del año Venus aparece como el lucero de la mañana, en otra época aparece como el lucero de la tarde y finalmente hay un tiempo en que Venus no aparece en el firmamento.
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