¿Quién sino yo tan ciego hubiera sido
Apariencia
- Soneto VII
¿Quién sino yo tan ciego hubiera sido, que no viera la luz? ¿Quién aguardara a que con tantas voces le llamara aquel despertador de tanto olvido? ¿Quién sino yo por el abril florido de caduco laurel se coronara, y la opinión mortal solicitara con tanto tiempo, en tanto error perdido? ¿Quién sino yo tan atrevido fuera que descolgara de Sión la lira, y al babilonio vil música diera? ¿Y quién, sino quien es verdad, la ira templara en mí, porque al morir dijera que toda mi esperanza fue mentira?