(Sobre) Allan Kardec
Nota: Se ha conservado la ortografía original.
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El gran propagador del Espiritismo, Leon Hipólito Denizart Rivail. que con el seudonimo de Allan Kardec tanto publicó y trabajó en pró de los doctrinas más dignas para la personalidad humana y mas consoladoras y justas para el porvenir del alma, nació en Lyon, el 3 de Octubre de 1804, procedente de una familia distinguida en loa anales de la magistratura y el foro. Desde sus primeros años sintió inclinacion irresistible por los estudios científicos y filosóficos, educándose en Yverdun (Suiza) en la escuela de Pestalozzi una de las lumbreras de la pedagógia, y distinguiéndose entre los aventajados discípulos de este sábio, cuyo sistema ha ejercido gran influencia en la enseñanza dada en Alemania y Francia.
Terminados sus estudios, volvió a Francia, donde se dedicó a la traduccion de diversas obras didácticas y morales vertidas al aleman. llegando por su inteligencia y asiduidad, á ser miembro de muchas sociedades sabias, y corporaciones científicas.
Desde los años 35 al 40, fundó en París cursos gratuitos en que personalmente esplicó química, fisica, anatomia comparada, astronomía y otros ramos de las ciencias naturales; y persistente en su afan de facilitar y propagar los mejores sistemas de educacion, inventó un ingeníoso método psro aprender á contar, y un cuadro mnemónico da la historia de Francia, á favor del cual se grababan en la memoria las fechas de los acontecimientos más notables, y de los grandes descubrimientos de cada reinado.
Para dar á conocer los frutos de su inteligencia privilegiada, de sus conocimientos científicos, y de su incansable laboriosidad, diremos que en el transcurso de veinte años publicó numerosas obras de educacion, alcanzando justa fama el Plan de mejoramiento de la instrucción pública, el Curso práctico y teórico de aritmetica, la Gramática francesa clásica, las Soluciones razonadas de problemas matemáticos, el Catecismo gramatical de la lengua francesa, el Programa de los cursos de química, física, astronomía y fisiología que enseñó en el liceo polimatico, y los Dictados especiales sobre las dificultades ortográficas, de que se han hecho y se hacen numerosas ediciones.
Hácia el año 1850, cuando la atencion pública del mundo civilizado empezaba á fijarse en las manifestaciones espiritistas, y la ciencia se ocupaba de los fenómenos que habian de cambiar el fondo y la forma de las creencias religiosas, morales y científicas, preparando el advenimiento de una nueva revelacion, Allan Kardec se dedicó de lleno á la constante observacion de las manifestacionas, al estudio de los principios de las leyes naturales que en ellas entrevió, y a la deduccion de las consecuencias filosóficos que debian convertir los hechos empíricos en un cuerpo de doctrina trascendentalísima.
Las principales obras que el infatigable escrítor produjo, considerado bajo su nueva faz de espiritista, fueron: el Libro de los Espiritus, parte filosófica, publicado en Abril de 1857; el Libro de los mediums, parte esperimental y científica, 1861; el Evangelio segun el Espíritismo, parte moral, 1864; El Cielo y el Infierno; El Genesis, los milagros y las profecías; y la Revista espiritista, publicacion mensual, empezada en 1858.
De la aparicion del libro de los Espíritus data la verdadera fundacion del Espiritismo, como doctrina filosófica sujeta á la critica racional, y al triunfo por la ciencia, que tan grandes éxitos alcanzó, y tantas inteligencias serias inundó con ene resplandores.
Allan Kardec era una garantía para los nuevos adeptos.
Un carácter entusiasta, sin método en la exposicion de principios, y con una fe ciega en ¡oe fenómenos, podria perjudicar la propagacion del Espiritismo en una sociedad analizadora, y escesivamente orgullosa de poseer la última palabra pronunciada por la ciencia racionalista; un espiritu como el de Allan Kardec, severo en el examen, dotado de análisis para los hechos, de método para su esplicacíon, de lógica para sus deducciones; incisivo, conciso, profundo en la forma, y dotado de un estilo sencillo y elevado al par, cual conviene en las obras de propaganda, para que las ideas no se resientan de una abstraccion metafisica que perjudique a su comprension, y para que su sublimidad no pierda con las vulgaridades de una díccion plebeya, debia llenar todas las aspiraciones, satisfacer todos las exigencias, borrar todos los escrúpulos, ocurrir á todas las objeciones, y asi sucedió, porque Allan Kurdoc trajo al planeta que habitamos la mision de apreciar hechos, plantear principios, sacar consecuencias, formar una ciencia, y propagarlo con su pluma entre los sábios e ignorantes, con su palabra entre los tibíos y polemistas, con su fé entre loa escépticos y atormentados por la inquieta duda que es la más terrible de las enfermedades morales.
Allan Kardec, murió el 31 de Marzo de 1869, victima de un aneurisma que sus trabajos intelectuales le impidieron atajar cuando habia remedio, y murió mártir de una idea que en él pudo más que la salud del cuerpo, y los bienes materiales de la existencia desahogada; murió cuando sus obras traducidas á todas las lenguas de Europa llevaban la buena nueva; cuando dejó organizada y constituida en París la Sociedad espiritista, heredera de sus trabajos y glorias; cuando era tiempo de premiar los padecimientos físicos, la grande laboriosidad, los merecimientos del que grabó en su bandera estas palabras: trabajo, solidaridad, tolerancia, porque el trabajo es la redencion del individuo, y su progreso; la solidaridad, principio que hermano todas los individualidades, haciéndolos originarias de Dios, y llevándolas a él; la intolerancia, en fin, respeto a la manifestacion libre de cada espíritu. á la vez que caridad por el daño que un alma caida, hermana de la nuestra, puede producimos con sus espiaciones.