A mis críticos (Eminescu)
Hay muchas flores, pero pocas
Darán fruto en el mundo,
Todas llaman a la puerta de la vida,
Pero muchas se sacuden muertas.
Es fácil escribir versos
Cuando nada tienes que decir,
Enfilando palabras vacías
Que en su cola sonarán.
Pero cuando tu corazón es inquieto
Por anhelos vivos y pasiones,
Y sus voces tu mente
Se queda para escucharles todas,
Como flores a la puerta de la vida,
Llaman a las puertas del pensamiento,
Todas piden su entrada en el mundo,
Piden las ropas del habla.
Para tus propias pasiones,
Para tu propia vida,
¿ Dónde tienes a los jueces,
A los implacables ojos de hielo ?
¡Ah! entonces te parece
Que en tu cabeza cae el cielo :
¿ Dónde encontrarás la palabra
Que exprese la verdad ?
Críticos, con flores vanas,
Que nunca han dado fruto -
Es fácil escribir versos
Cuando nada tienes que decir.