A un rico
Apariencia
¿Quién te ha dado tu hacienda o tu dinero? O son fruto del trabajo honrado, o el haber que tu padre te ha legado, o el botín de un ladrón o un usurero. Si el dinero que das al pordiosero te lo dio tu sudor, te has sublimado; si es herencia, ¡cuán bien lo has empleado!; si es un robo, ¿qué das, mal caballero? Yo he visto a un lobo que, de carne ahíto, dejó comer los restos de un cabrito a un perro ruin que presenció su robo. Deja, ¡oh rico!, comer lo que te sobre, porque algo más que un perro será un pobre, y tú no querrás ser menos que un lobo.