Carta a Rubén Darío
Moguer, Junio 2 - 1900
Sr. D. Rubén Darío
Maestro y amigo muy querido:
Supongo en su poder una carta mía, en la que le daba cuenta de mi regreso de Madrid; aún estoy delicadísimo del pecho y la cabeza.
Por este mismo correo y en paquete certificado, remito a V. mi libro Ninfeas; las últimas poesías van aún en primeras pruebas; no he querido esperar más, pues se va prolongando mucho la saliva de mis libros. Encontrará V. algunas poesías nuevas, desconocidas para V..
Ahora, me atrevería a rogarle que, me hiciese el prólogo, lo más brevemente posible; si no tiene tiempo, hágalo corto o, en verso o como crea más fácil y pronto, evitándose molestias; pero no deje de hacerlo, que colmará V. de ese modo mi ilusión de muchos días. En la imprenta está suspendida la tirada del libro, esperando el prólogo, para tirar las primeras páginas y el índice, arreglándose a la cantidad de cuartillas que V. me remita.
Tengo grandes deseos de que salga pronto mi libro, pues tengo ya otros dos en preparación; en el que lo tiro todo es en Besos de Oro libro que honraré con la dedicatoria a V. tiene dos partes; una llamada «Bruma» en donde irán las poesías de ensueño y de dolor y de nostalgias; y otra, titulada «Luz» que estará formada por las poesías cerebrales, fábulas mitológicas, etc.; una parte de plata y otra de oro.
También trabajo en El poema de las Canciones, de cuyo libro forman parte «La Canción de la Carne» y la de los «Besos» que van en Ninfeas.
Ya remitiré a V. originales, para que vaya V. conociendo los nuevos libros; brevemente enviaré a V. El jardín de los cipreses y El Palacio negro, poemas de Besos de oro. De hoy en adelante, mis libros no llevarán prólogos; quiero que el de V. en Ninfeas sea solamente mi presentación.
Vuelvo a rogarle que, sin violentarse me haga pronto el atrio, bien en prosa, bien en verso y como V. quiera y crea más conveniente y rápido.
Un abrazo estrechísimo de su apasionado admirador y amigo.
Juan Ramón Jiménez
4c. Cánovas. - 10 Moguer
(Huelva)