Cuelgan racimos de ángeles que enrizan
Apariencia
- A la Decensión de Nuestra Señora
- Soneto LV
Cuelgan racimos de ángeles, que enrizan la pluma al sol en arcos soberanos, humillan nubes promontorios canos, y de aljófar la tierra fertilizan. Desde el cielo a Toledo se entapizan los aires de celestes cortesanos con lirios y azucenas en las manos, que la dorada senda aromatizan. Baja la Virgen, que bajó del cielo al mismo Dios; pero si a Dios María, hoy a María de Ilefonso el celo. Y como en pan angélico asistía Dios en su iglesia, el cielo vio que el suelo ventaja por entonces le tenía.