De la comisión: 04
Capítulo IV
Y aquí era donde yo le quería ver.
Tiene la palabra La Correspondencia:
«Ha llegado a Madrid el señor don Pedro Pastrana Rodríguez, diputado adicto por el distrito de Villaconducho, vencedor del marqués de Pozos-Hondos en una empeñada batalla electoral.»
Pasan algunos días; vuelve a tener la palabra La Correspondencia:
«Es notabilísima, bajo muchos conceptos, y muy alabada de las personas competentes, la obra publicada recientemente sobre Los amillaramientos y abusos inveterados de la ocultación de riqueza territorial, por el diputado adicto señor don Pedro Pastrana Rodríguez.»
«Ha sido nombrado de la Comisión de *** el reputado publicista financiero señor don Pedro Pastrana Rodríguez, diputado adicto por Villaconducho.»
«No es cierto que haya presentado voto particular en la célebre cuestión de los tabacos de la Vuelta del Medio el ilustrado individuo de la Comisión señor Pastrana Rodríguez.»
«Digan los que quieran los maliciosos, no es cierto que el ilustre escritor señor Pastrana haya adquirido la propiedad de la marca 'Aliquid chupatur', con que se distinguen los acreditados tabacos de Vuelta del Medio. No es el señor Pastrana el nuevo propietario, sino su paisano y amigo el alcalde de Villaconducho, señor Pespunte.»
«Ha sido aprobado el proyecto de ley del ferrocarril de Villaconducho a los Tuétanos, montes de la provincia de ***, riquísimos en mineral de plata; los cuales Tuétanos serán explotados en gran escala por una gran Compañía, de cuyo Consejo de Administración no es cierto que sea presidente el individuo de la Comisión a cuya influencia se dice que es debida la concesión de dicho ferrocarril.»
«Parece cosa decidida el viaje del Jefe del Estado a la provincia de ***. Asistirá a la inauguración del ferrocarril de los Tuétanos, hospedándose en la quinta regia que en aquella pintoresca comarca posee el señor Pastrana.»
«...No pueden ustedes figurarse a qué grado llegan el acendrado patriotismo y la exquisita amabilidad que distinguen al gran hacendista, de quien fue huésped Su Majestad, nuestro amigo y paisano el señor marqués de Pozos-Oscuros, presidente, como saben nuestros lectores, de la Comisión encargada de gestionar un importante negocio en las capitales de Europa.»
«Ha sido nombrado presidente de la Comisión que ha de presentar informe en el famoso negocio de los tabacos de Vuelta del Medio el señor marqués de Pozos-Oscuros, ya de vuelta de su viaje a las Cortes extranjeras.»
«Satisfactoriamente para el sistema parlamentario y su prestigio, ha terminado en la sesión de ayer tarde el ruidoso incidente que había surgido entre el señor marqués de Pozos-Oscuros y el señor Pespunte, diputado por la Vuelta del Medio. El señor Pespunte, en el calor de la discusión, y un tanto enojado por el calificativo de ingrato que le había dirigido el presidente de la Comisión, pronunció palabras poco parlamentarias, tales como 'ropa sucia', 'manos puercas', 'río revuelto', 'bragas enjutas', 'fumarse la isla', 'merienda de negros', 'presidio suelto', 'cocinero y fraile', 'peces gordos' y otras no menos malsonantes. El digno diputado de la isla hubo de retirarlas ante la actitud enérgica del señor marqués de Pozos-Hondos, ministro de Hacienda, que declaró que la honra del señor marqués de Pozos-Oscuros estaba muy alta para que pudieran mancharla ciertas acusaciones. Nos alegraríamos, por prestigio del sistema parlamentario, de que no se repitieran escenas de esta índole, tan frecuentes en otros Parlamentos, pero no en el nuestro, modelo de templanza.»
Hasta aquí La Correspondencia.
Ahora un oficio de la Fiscalía: «Advierto a usted, para los efectos consiguientes, que ha sido denunciado por esta Fiscalía el número primero del periódico El Puerto de Arrebatacapas, por su artículo editorial, que titula '¡Vecinos, ladrones!', que empieza con las palabras 'Pozos oscuros, y muy oscuros', y termina con las 'a la cárcel desde el Congreso'».