Estampas románticas: III
Apariencia
Encanto mustio, frío encanto versallesco
del budoir... Empañado cristal de las arañas...
Del celeste plafond, donde se admira un fresco
de Mignar, cuelgan aúreos hilos de telarañas...
Pende, ya desdorado, de la pared desnuda
el espejo que viera el mohín de Madama,
mientras algún abate decía un epigrama
casi mordiendo el raso de su oreja menuda...
El elegante osario del lindo tiempo ido,
hoy parece la estancia de esfumados aromas,
donde es tal el silencio que se escucha el ruido
que hacen, al taladrar los muebles, las carcomas...