Guerra (DEIE)/Cuadro de las batallas: 09

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GUERRA : CUADRO DE LAS BATALLAS MEMORABLES DESDE EL PRINCIPIO DE LA ERA VULGAR HASTA NUESTROS DÍAS

Vitoria (Esp. Alava), 1813. José Bonaparte hace frente con su ejército al aliado que dirigía Wellington. Con gran denuedo defendieron sus posiciones los franceses; pero por último se desordenaron en términos que no trataron mas que de ponerse en salvo atropelladamente. Artillería, almacenes, bagajes, quedaron á disposición de las tropas aliadas que se abalanzaron, ansiosas de quitar á los franceses las usurpadas riquezas, sobre el abundante botín derramado por los campos. Ciento cincuenta y un cañones perdió su artillería y 8,000 hombres entre muertos y heridos. 5,000 combatientes costó á Wellington esta señalada victoria.


San Marcial (Esp. Guipuzcoa), 1813. Obstinada acción entre los ejércitos aliado y francés. Este fue rechazado costándonos esta parcial victoria 1688 hombres entre muertos y heridos. El enemigo tuvo mucha mas pérdida por la tenacidad y arrojo con que peleó. D. Manuel Freire que mandaba los españoles, y todos estos ganaron inmortal prez pues según dicho de lord Wellington "se portaron los españoles como las mejores tropas del mundo."


Orthez (Francia), 1814. Los aliados atacan al ejército francés que se defendió con bizarría. Por último fueron derrotados con pérdida de 12,000 hombres, inclusos los extraviados. Murió también el general Bechaud, y Foy quedó gravemente herido. La pérdida de los aliados ascendió á 2,300 hombres entre ellos 600 portugueses.


Tolosa (Francia), 1814. El ejército aliado ataca al francés mandado por el general Soult. Mucha fué la pérdida de ambas partes aunque no tanta como se creía por lo obstinado que fué el combate. La pérdida de los aliados se calculó en 4.714 hombres en esta forma: 2,124 ingleses, 1,983 españoles y 607 portugueses. Los franceses se atribuyeron la victoria, lo que no parece probable pues que abandonaron precipitadamente á Tolosa, que fué ocupada por Wellington, á quien recibieron sus moradores con grande aplauso.


Permítasenos terminar aquí este articulo que debía acabarse en la conclusión de la última guerra civil. La pluma se resiste á trazar el relato de los horrores que prodiga por do quiera una lucha fratricida. Por otra parte, los hechos de armas, aunque brillantes muchos de ellos, no han sido de tanta importancia como los de que nos hemos ocupado, no obstante de haberse distinguido valientes caudillos y dado pruebas el ejército español de constancia y sufrimiento á toda prueba.



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