Montería es la villa soñada En las ondas del raudo Sinú Como la urbe que avanza aclamada Sobre un valle de espléndido azul.
I Gran ciudad que blasonan los cuernos Con sus arcos de acción y de luz, Manantial de valores eternos, Heredera inmortal del Sinú.
II Noble sangre le ofrenda el torero En las lidias de su arte sin par: Tradiciones del veinte de Enero, Como ritos de honor secular.
III Cual trasmallo en plena subienda Es la pesca de su alto sedal Y cual mieles de antigua molienda Nos ofrece su aliento vital.
IV Sus varones de recia pujanza La tallaron cual un pedestal Para el héroe de joven semblanza Que hoy le imprime su gesto marcial.
V El progreso se rinde a sus plantas De atrayente y gentil capital Y en las voces de cada garganta Montería es un Himno Triunfal!