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Historia Verdadera del México Profundo/3

De Wikisource, la biblioteca libre.
Historia Verdadera del México Profundo
de Guillermo Marín Ruiz
La civilización del Anáhuac

3. LA CIVILIZACIÓN DEL ANÁHUAC.

Lo que hoy conforma el territorio de nuestro país, fue la cuna de una de las seis civilizaciones más antiguas con origen autónomo del planeta y la que logró el más alto desarrollo humano para todo el pueblo en la historia de la humanidad. Nuestros Viejos Abuelos se llamaban a sí mismos, Anahuacas, pues al continente le llamaban en lengua Náhuatl (que era la lengua franca), "Cem Anáhuac". Esta civilización ha tenido una sola matriz filosófico-cultural, por diferentes culturas que la han expresado; en tiempos y espacios diferentes, con un hilo conductor en sus tres grandes períodos.

La etapa de formación e invención de todos los conocimientos; empezando por la invención de la agricultura y el maíz, base y sustento de todo un pueblo a lo largo de su existencia. Estas seis culturas madre tuvieron un cultivo como base de su alimentación; unas el trigo, otras la papa, el arroz o el mijo; pero nuestros antepasados "inventaron" el maíz, ya que éste era un pasto que a través de un proceso, que hoy podemos llamar "ingeniería biogenética", se logró crear este maravilloso alimento que hoy en día le da de comer a muchos pueblos de los cinco continentes.

Este esfuerzo sólo fue posible gracias al trabajo de investigadores y científicos, que a lo largo de una generación a otra, a través de milenios pudo desarrollar este maravilloso alimento.

En efecto, nuestros antepasados iniciaron ellos solos, un largo camino, para dejar de ser nómadas, salvajes cazadores, recolectores, para iniciar lentamente el desarrollo de conocimientos del mundo, la vida y la naturaleza, que les permitiera, no solo asegurar su existencia y supervivencia material; si no tal vez, lo más importante, lograr la trascendencia de su existencia, como individuos y como pueblo.

Estos siete mil quinientos años de historia del Desarrollo Cultural de nuestro pueblo, los especialistas lo han llamado época "PREHISPANICA". Es importante subrayar la visión colonialista y Occidental de la historia, vista por los ojos de los vencedores. ¿Por qué nombrar a lo "propio nuestro", a nuestros Viejos Abuelos y su milenaria historia, con la referencia del invasor conquistador español? ¿Por qué no llamarla época PRECUAUHTEMICA? La historia la escriben los vencedores, por eso debemos tener presente, ¿Qué tipo de historia conocemos?

Pues bien, a la historia de nuestros Viejos Abuelos antes de la invasión europea, los especialistas la han dividido en tres períodos.

El primero es el llamado PRECLÁSICO, que los investigadores lo sitúan aproximadamente del año seis mil a.C. al año 200 años a.C.

El segundo período es el CLÁSICO, que parte del año 200 a.C. al 850 900 d. C.

El tercer período que inicia alrededor del año 850 900 d.C. y concluye con la invasión europea y la toma de Tenochtitlán en 1521.

a) Preclásico 6000 a.C. 200 a.C. 5800 años. (73%)
b) Clásico 200 a.C. 850 d.C. 1050 años. (13%)
c) Postclásico 850 d.C. 1521 d.C. 671 años. (8%)
d) Colonia 1521 d.C. 2011 490 años. (6%)

Este increíble espacio de tiempo, 7500 años (casi cuatro eras Cristianas), lo podemos comparar con los últimos quinientos años de historia, que con propiedad podríamos llamar "época prehispánica". El lector apreciará que la base estructural de lo que hoy conforma nuestra nación, indiscutiblemente hunde sus raíces en el México indígena.

Es importante mencionar, que como en su mayoría son extranjeros los que se han interesado por la historia antigua de México y por consiguiente, han “estudiado e investigado” el México Antiguo como lo señala Bonifaz Nuño, casi siempre con un ignorante menosprecio y un aire de superioridad. Un día al investigador Paul Kirchhoff[1] se le ocurrió dividir al Anáhuac en: Mesoamérica (tomado del concepto de Mesopotamia que significa “entre dos ríos” de la cultura Sumeria) y Árido América. Es decir, los “indios-cultos-muertos-desaparecidos-del pasado” que hacían pirámides y objetos bellos para el culto a sus dioses y que vivieron desde lo que hoy son los estados de Sinaloa, Zacatecas, San Luis Potosí y Tamaulipas hacia el Sur y, los “indios-salvajes-muertos-desaparecidos-del-pasado”, que vivieron en la región Norte de México. Sin embargo, la matriz filosófica cultural del Anáhuac la compartieron todos los pueblos, desde Alaska hasta Nicaragua, creando una civilización continental que desde la equivocación de Colón, al confundir este continente con la India, los europeos no han querido o no han podido conocer y comprender. Tal vez por eso, después de quinientos años de saber que Cristóbal Colón (1451-1506) se equivocó y no llegó a la India, les siguen diciendo a los pueblos originarios del Anáhuac, “indios”, que es el gentilicio de las personas nacidas en la India.

La civilización anahuaca no sólo estuvo presente y vigente en todo lo que hoy conforma el territorio nacional. Nosotros suponemos que esta Civilización es de carácter CONTINENTAL. En efecto, actualmente existen “elementos culturales” muy similares, lo mismo entre un indígena Kumiai de Baja California, que un indígena Maya de Quinta Roo. Pero al mismo tiempo, estas similitudes básicas las encontramos entre un indígena del Canadá y un indígena de La Patagonia, pasando por la gran llanura de Norte América, México, Centro América, la Zona Andina y el Amazonas. Los valores esenciales de la vida, la muerte, la naturaleza, el cosmos, lo divino y lo sagrado, los comparten armoniosa e íntimamente todos los pueblos llamados “indígenas” del continente Americano. Lo que nos une y nos identifica a los pueblos con raíces indígenas es la matriz filosófica-cultural que nos estructura y no la supuesta “latinidad” que se inventó Napoleón III para apoderarse de la América no sajona en el siglo XIX o la “hispanidad” con la que los angloparlantes nos catalogan en el siglo XX.

El desprecio que hemos heredado de los cinco siglos de colonialismo hacia la valoración y respeto de los pueblos originarios, hacia los Viejos Abuelos, hacia nosotros mismos, queda claro al llamarlos despectivamente "indios". Pues desde hace muchos siglos, se supo que Cristóbal Colón se equivocó y que no llegó a la India en la búsqueda de una nueva ruta comercial, por lo cual, los pueblos "encontrados" no fueron los "indios" esperados. Después de tantos años, por el colonialismo, ni siquiera nos ha interesado saber, como se llamaban a sí mismos nuestros antepasados. Dicho de otra manera, hemos perdido la memoria histórica, el interés y orgullo de nosotros mismos.

Los Antiguos Mexicanos le llamaban al continente CEM ANAHUAC y ellos se reconocían como ANAHUACAS, por lo que existían los anahuacas mayas, los anahuacas zapotecas, los anahuacas mexicas y así sucesivamente.


  1. “Mesoamérica, sus límites geográficos composición étnica y caracteres culturales. 1943.