Lucinda, yo me siento arder, y sigo
Apariencia
- Soneto 81
Lucinda, yo me siento arder, y sigo el sol que deste incendio causa el daño; que porque no me encuentre el desengaño, tengo al engaño por eterno amigo. Siento el error, no siento lo que digo, a mí yo propio me parezco extraño; pasan mis años, sin que llegue un año que esté seguro yo de mí conmigo. ¡Oh dura ley de amor, que todos huyen la causa de su mal, y yo la espero siempre en mi margen, como humilde río! Pero si las estrellas daño influyen, y con las de tus ojos nací y muero, ¿cómo las venceré sin albedrío?