A Cartago, Egipto, Babilonia, Persia y Bactriana (93).
Mirando mas profundamente el carácter individual y nacional de las diferentes razas griegas(04), se ha visto que si entre los Dórios, y en parte entre los Eólios, predomina un natural severo, algo de esclusivo y concentrado, en la raza mas espansiva de los Jónios se agitaba dentro y fuera una vida movible, continuamente despierta por la necesidad de obrar y el deseo de conocer. Entregada á las impresiones de su sensibilidad, alimentando su 1maginacion con el encanto de la poesía y de las bellas artes, la raza jónica llevó á todas las colonias por donde hubo de es tenderse el gérmen bienhechor de un perfeccionamiento indefinido.
El aspecto físico de la Grecia ofrece el atractivo particular de una comarca continental y maritima á la vez. La riqueza de contornos en que se funda este doble beneficio debió engendrar desde mu y temprano en los Griegos.la aficion á la navegacion, á un comercio activo y á frecuentes comunicaciones con los pueblos estranjeros. La preponderancia marítima de los Cretenses y de los Rodios fue seguida de las espediciones emprendidas ante todo con miras de rapiña y de piratería, por los Samios, Focios, Tafios y Thesprotas. El alejamiento de la vida marítima que revelan los poemas de Hesiodo, ó arranca solo de una dis posicion personal, ó se esplica por la timidez y la inesperiencia nauticas que debieron retener á los pueblos de la Grecia continental en el momento en que comenzaba la obra de su civilizacion. Por el contrario, las primitivas leyendas y los mas antiguos mitos hacen siempre referencia á viajes lejanos ó á alguna espedicion marítima, como sl la imaginacion aun juvenil de la raza humana se complaciera en la oposicion de las creaciones ideales con una estrecha realidad. De aquí han nacido las espediciones de Baco y de Hércules, adorado en el templo de Gades bajo el