SALVADORA MEDINA ONRUBIA 303
más arriba del sol... ¡Y él ha caído!... Fuí yo. que lo maté por endiosarlo... Mas, vive su recuerdo: por buscarlo suspendo el corazón como un oído
sobre el alma... Y allá dentro, lo escucho junto al de un muerto al que he querido mucho... Es mi serena paz, tan dolorida,
que prefiero la angustia que sufriera, y a costa de mi sangre, ¡yo quisiera elevarlo otra vez sobre mi vida!...
REFLORACION
Cuando el dolor tronchó mi amor un dia, quitándome la dicha, gota a gota, y cayó mi esperanza entera, rota, sintió mi corazón que se moría...
El ansia enorme que en mi ser sentía y mi angustia infinita de derrota lloraron su canción... y cada nota como una llaga en sangre me dolía.
Hoy el pobre vencido se ha animado y más alto y más fuerte ha despertado bajo el conjuro azul de otros amores...
Y en éste, de querer dulce tormento, como triunfo de dicha, yo lo siento abrirse entero y puro, todo en flores...