LAURA PICCININI DE DE LA CÁRCOVA 353
Cuando algún episodio deja al irse, por mucho tiempo la impresión grabada en la vida del hombre; nadie, nada borrará esa impresión: podrá extinguirse
como la llama cuando mengua el fuego, mas removiendo las cenizas luego aparecen las brasas...; sugerente
símbolo del recuerdo en la memoria. En cada ser humano hay una historia que no se borra nunca de la mente.
VENERABLE SILLON
Venerable sillón que un tiempo, fuiste majestuoso sillón en la casa solariega, viejo sillón caído en la refriega,
de los hidalgos dueños que tuviste.
Tu armazón insegura ya no viste aquel damasco de lujosa seda;
una funda raída sólo queda
para ocultar el cambio que sufriste.
Oh, cuántas confidencias atesoras de horas alegres o de tristes horas. ¡Si supieras hablar! Cuántas heridas
sobre tu respaldar se habrán cerrado, venerable sillón que has conservado el perfume sutil de cosas idas...