POESÍAS
DE
DON DIEGO HURTADO DE MENDOZA.
JUICIOS CRITICOS.
DE FERNANDO DE HERRERA
(En las Anotaciones á Garcilaso).
DON DIEGO DE MENDOZA habló maravillosamente y trató sus concetos, que llaman del ánimo, y todas sus perturbaciones con mas espíritu que cuidado, y alcanzó con novedad lo que pretendió siempre, que fué apartarse de la comun senda de los otros poetas, y satisfecho en ello, se olvidó de las demás cosas; porque, si como tuvo en todo lo que escribió erudicion y espiritu y abundancia de sentimientos, quisiera servirse de la pureza y elegancia en la lengua, y componer el número y suavidad de los versos, no tuviéramos invidia á los mejores de otras lenguas peregrinas. Y no se puede dejar de conceder que cuando reparó con algun cuidado, ninguno le hizo ventaja; pero, como él se ejercitó por ocupar horas ociosas ó librar el ánimo de otros cuidados molestos, así la grandeza de sentimientos y consideraciones y el natural donaire y viveza de sus versos lo desvian, como tengo dicho, de la poesía comun.
DE LOPE DE VEGA
(En el prólogo del Isidro; Madrid, 1599).
¿Qué cosa iguala á una redondilla de Garci Sanchez ó DON DIEGO DE MENDOZA?
DE DON TOMAS TAMAYO DE VARGAS
(En las Anotaciones á Garcilaso).
El ingenioso caballero DON DIEGO DE MENDOZA ¿qué quiso decir que no pudiese en sus coplas castellanas?
DE DON DIEGO DE SAAVEDRA FAJARDO
(En la República Literaria, siguiendo á Herrera).
Sucedió á estos DON DIEGO DE MENDOZA, el cual es vivo y maravilloso en los sentimientos y afectos del ánimo, pero flojo é inculto.