la compatible con las condiciones impuestas por la constitución misma del sistema. Los vectores que miden esta cantidad de movimiento se suman siguiendo la regla general del polígono, por cuyo procedimiento se obtiene una resultante general, que se denomina cantidad de movimiento del sistema, y un par resultante. Fundándose en los postulados que ya he recordado, se demuestra con todo rigor que si las fuerzas exteriores al Sistema son nulas; esto es, si dicho sistema permanece perfectamente aislado, tanto aquella cantidad de movimiento como el momento del par permanecen constantes. Cuando existen fuerzas exteriores, dichas magnitudes cambian de tal modo que sus incrementos elementales son iguales, respectivamente, a los impulsos de la resultante y del par a que se reduce el conjunto de dichas fuerzas.
Tal es el teorema general de la conservación de la cantidad de movimiento.
Por otra parte, también cada uno de los puntos materiales tiene su energía cinética, , y como esta magnitud es de naturaleza escalar, se obtendrá la correspondiente al sistema mediante la simple suma aritmética . Sin duda, las fuerzas internas trabajan mientras los puntos se mueven individualmente, y estos trabajos, como son también