Ir al contenido

Página:Calzadilla Beldades de mi tiempo.djvu/122

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
122
LAS BELDADES DE MI TIEMPO

ba, las cuales ccntinuaron hasta después de la caida de Rozas.

Estas tertulias tenian una particularidad y era la de que nunca nos daba una taza de te, porque siempre decia que la leche se habia cortado. Pero lo que todos sabiamos que se le habia cortado, no era la leche, sino que nunca la compraba por falta de cum quibus, que según voces no andaba muy abundante.

Otras tertulias, ya de mas tono, de levita o de frac, pues el jacquet, ese vestido neutro que tiene de ambos mitad por mitad sin decidirse por ninguno, era excepción en esta época, y con él hacian su papel de entrada los jóvenes y ahora... ni memoria de ellos; quien va al presente a una tertulia con jacquet! no faltaba más! preferiase ir de saco como ya hemos visto aparecer algunos con el nombre británico de smoking para autorizar su uso. ¡Qué aberración!!... la moda es más despotica que la Municipalidad.

Pero las costumbres venian modificándose a medida que nos acercébamos a la época de Rozas, en que las tertulias més espectables eran las que se daban por las señoras de Rojas frente a la casa de misia Mariquita Tompson, calle Perú (hoy calle Florida) y las que tenian lugar en la morada de misia Micaela Camuso. Estas tertulias, cuyos detalles marcaban ya alguna variacion en los usos, eran las que daban el tono social, y a ellas concurria la flor y nata de la juventud que es la que acepta e introduce todo lo que de moderno nos envia la Europa, dominando, por supuesto, la de Francia, que era por ello instintivamente lo mas repulsivo para Rozas.

A esas tertulias asistian infaltablemente los jóvenes Frias: Félix, Luis y Juan que se hicieron notables por su habilidad y eximio gusto para el