BAŽODBLE Y Autate HISTORIADORES DE CHILE. 484 thoiad y cudicia los campos mas amenos, con daño de sus comarcanos y vecinos, que despojarlos y excluirlos de ellos solicita. La tierra está repleta (dijo Isaías) y llena de oro y plata, y abundante de tesoros grandes, y no tienen límite ni fin alguno; cuyas palabras explicó el glorioso padre San Gerónimo de esta suerte: no penseis, dijo, que los tesoros de esta vida no tienen limitacion ni paradero, que no fué el intento del profeta ese, sino es porque los ánimos de los que los poseen, no se llenan jamas ni se satisfacen de ellos; y esto lo estamos hoi experimentando en algunos que gobiernan, que no se ven repletos ni hartos (digámoslo así) de la sangre de los pobres de este lastimado reino, por haberle faltado el tesoro que tenia, y los vasallos humildes del Rei, nuestro señor, que le aumentaban. No tratan de otra cosa en estos siglos, ni los que gobiernan tienen otro blanco, que atender al aumento de sus bienes y intereses con conocido daño y perjuicio del comun de un reino atribulado, y de los que son y han sido en el servicio de S. M. contínuos; pues vemos que sin empacho ni rebozo, aplican para sí las encomiendas, los oficios, correjimientos, y las demas conveniencias y provechos, dándolos públicamente a quienes por su dinero los solicitan, con que se quedan en la calle desnudos los pobres beneméritos, y sus hijos sin tener un pan que comer; con que unos huyendo y otros desterrados, salen a buscar remedio a tierras extrañas, dejando mas de fuerza que de grado el amor de la patria y el deseo entrañable de asistirla en sus mayores trabajos y defenderla en sus conflictos y penalidades. ¿Cómo puede de esta suerte conseguirse en Chille la paz que se desea? cómo no ha de ser la guerra inacabable? que este es el principal fundamento de esta historia, de adonde vamos sacando estas ajustadas consecuencias. ¿Habrá alguno que contradiga estas verdades? Algunos lisonjeros o insolentes aduladores podrán escurecerlas ni ocultarlas, cuando son tan manifiestas y patentes? No, de ninguna manera; porque si los mesmos gobernadores a voces publican y dan a entender que S. M. (Dios le guarde) les da estos gobiernos por premio de sus servicios, para que se aprovechen y soliciten sus medras, y que para solo su plato y mesa les tiene dedicados los correjimientos de sus partidos, y estos los venden conforme las ocasiones: ¿cómo podrán negar ser esto así? y no es lo mas perjudicial el que lo hagan, sino es que públicamente dicen y han dicho algunos, que no vienen a estos gobiernos de las Indias a solicitar conveniencias públicas, sino es al aumento de las suyas; pues, ¿qué tenemos que inquirir mas causas para verificar que son y han sido la total ruina de este reino los superiores que han seguido y siguen este mal stilo de gobierno, variando sus pensamientos y trocándose con los tiempos, como en las elecciones de estos oficios y de los demas de la milicia; que en habiendo quien los pague, fácilmente tripulan al que es digno, y al que lo tiene trabajado y merecido. De estos no podemos decir lo que el rei profeta, que no se moverán jamas, porque juran de premiar al benemérito y le engañan, son públicos usureros, no tan solamente con lo que es suyo, sino es tambien con lo ajeno, recibiendo dádivas y
