OBJETIVO DEL PUEBLO: GANAR EN MARZO DE 1973
De estos hechos nace hoy también una conclusión que el pueblo de Santiago y los trabajadores de Chile deben entender. Ahí está el ejemplo de Coquimbo. En marzo del próximo año habrá elecciones generales para renovar toda la Cámara y dos tercios del Senado. Yo llamo al Pueblo de Chile a mirar esta meta; si ganamos en Coquimbo debemos ganar, y podemos y tenemos que ganar en marzo del próximo año para ganar la mayoría del Congreso Nacional (APLAUSOS). Cada trabajador, desde su hogar, todos los que tienen derecho a voto, y ahora lo tienen los jóvenes desde los 18 años, lo tienen los analfabetos si están inscritos, nadie nos puede derrotar. Y si cada hombre y cada mujer de la Unidad Popular cumple la tarea de inscribir uno o dos compañeros, familiares y amigos, nadie nos podrá derrotar; si nosotros tomamos la dignificadora tarea de inscribir a miles y miles de chilenos, hombres y mujeres, a quienes la injusticia de un régimen social les impidió aprender a leer y escribir; si nosotros inscribimos a la inmensa mayoría de analfabetos de Chile obtendremos una victoria segura. Compañeras y compañeros de la Unidad Popular, pueblo de Chile, trabajadores de Santiago, la meta de marzo próximo debe ser la meta de la historia, del Partido Federado, del partido de los trabajadores, de la Unidad Popular. (OVACION)
Me interesa que Uds, comprendan que frente al conflicto político suscitado, entre la mayoría opositora del Congreso y el Gobierno, me empeñé en buscar solución; de allí nació el diálogo sin sectarismo, no a espaldas del pueblo, sino sencillamente para poder analizar y ver si era posible llegar a un acuerdo. Sabíamos de antemano lo difícil que era lograrlo, porque indiscutiblemente basta leer la prensa y oir las radios, los sectores reaccionarios de este país y los sectores comprometidos de centro-izquierda o de centro-derecha buscaban la manera de que fracasara este entendimiento.
Sin embargo, hicimos bien en buscar el diálogo y yo pude patrocinarlo porque sé perfectamente bien que ningún trabajador pensó jamás que su Compañero Presidente de la República estaba traficando con el Programa y los Principios de la Unidad Popular.