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Página:ChFSA FD1197306170(1).djvu/5

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Cuando se anunció que los trabajadores no recurrirían a los Tribunales y que había la posibilidad de un paro —por no decir que esta es una huelga ilegal— hice llamar a los trabajadores, a sus dirigentes. Vinieron los 45 integrantes del zonal O'Higgins, presididos por el señor Medina. Conversé con ellos durante largas dos horas y media. Fuí claro, directo, honesto como soy siempre, sobre todo para plantear los problemas reales que vive el país. No oculté nada y les hablé a los trabajadores de compañero a compañeros. Les advertí la dura situación por que atravesábamos: el proceso inflacionista que sacude fuertemente nuestra economía, el alza del costo de la vida, la dificultad de abastecimiento, los problemas internacionales, la carencia de divisas, los conflictos que tenemos que enfrentar en la renegociación de la deuda externa. Les hice ver que, a mi juicio, no podía haber reajuste sobre reajuste; que los trabajadores deberían buscar y encontrar una fómula que permitiera mayores ingresos, pero vinculados estos ingresos a la producción y a la productividad. Por último, les dije: "si ustedes quieren una interpretación distinta de la Ley, les propongo, compañeros, que se nombre una Comisión integrada por los dirigentes de ustedes y por representantes de la Compañía El Teniente. Si hay discrepancias, si no se llega a una solución, traíganme a mí las diferencias y yo resolveré". No se hizo caso a mi indicación, y se produjo la paralización parcial de El Teniente. No se hizo caso a lo que yo planteara. Más que eso; a lo que pidiera, a lo que solicitara con fervor, frente a la realidad económica que vive Chile.

Y se paralizó parcialmente "El Teniente". El Gobierno entregó una fórmula que se discutió y analizó por los trabajadores que estaban laborando y por aquellos que habían paralizado las faenas; fue aprobada la fórmula del Gobierno; se reintegraron al trabajo la mayoría de los obreros. No ocurrió lo mismo con los empleados. La mayoría de los empleados siguió en el paro. Pero si tomábamos en cuenta obreros y empleados, la mayoría trabajaba. Y por cierto que ha aumentado día a día el número de los que se han reintegrado al trabajo. ¿Pero que sucedió en el intertanto? ¿Qué pasó en Rancagua? ¿Cuál fue la actitud de aquellos que no acataron la resolución mayoritaria, sobre todo en los Sindicatos industriales, en los sindicatos