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Más valiera que se hubiese atenido al arache y al cavache (1).

—Pues yo he querido que aprienda, señor, que el saber no estorba; y que siempre se ha dicho queel pobre puede ser rico, y el rico no compra ciencia; eso no quita que el hijo mio sea un pan de rosas.

—¡Si, un pan de rosas! ¡Por via del atun salado!

¡Con un genio bragado y pintado por el lomo! ¡Pan de rosas! que cuando no está preso lo andan buscando, Y al que el año pasado se le formó causa por una riña, y en este por una pendencia.

—Falsos testimonios que le han levantado, señor; lo que tiene es que unos echan agua en caldera y no suena; y otros en lana, y suena...

—Se le cogió fragantelito, yo lo vi.

—Eso fué allá en años temporas. ¿A qué, sin venir á cuento, saca su mercé titulitos de ayer? Cada uno en este mundo tiene su ventanita, los unos grande, los otros chica.

—Lo he sacado para decirle que se largue su pan de rosas de sobrino de Vd.; y cuanto antes mejor; y que Dios le ayude y á nosotros que no nos olvide.

—Señor, crea su mercé que mi sobrino es una prenda; lo crió Dios con mucha atencion; y sobre todo, Señor D. Martin, es mi ayuda..

—¿Qué habia de ser ese mamanton su ayuda, Cris(1) Es decir, á arar y cavar.