creyentes, y enristrando con todos, seguro de anonadarlos sin dificultad, en el palenque que mantenía resuelto y fuerte. Cristóbal Colón, servidor de Dios, su apostolado, su santidad, segunda edición ampliada de El embajador de Dios; Los dos atahudes, y principalmente Satanás contra Cristóbal Colón ó pretendida caída del servidor de Dios, son libros sucesivos de controversia en que, á diferencia de los de propaganda, ha esgrimido las armas de más duro temple, disparando sobre los adversarios indignación y menosprecio, hasta el momento de ceñirse de propia mano el laurel que consideró ganado.
El canto de la victoria llena el último, mejor dicho, el más reciente de los libros escritos por el Conde de Roselly, fresca todavía la tinta de los caracteres que lo titulan Historia póstuma de Cristóbal Colón.1 En este libro se compendian los trabajos todos del incansable adalid, á la vez que se encierra la quinta esencia de su pensamiento: uno tras otro aparecen maltratados y caídos cuantos enemigos encontró en la triunfante carrera.
Año dichoso el de 1885, que ha registra-