criollas como las extranjeras se cultivan muy bien. En el Nord-Oeste del territorio se obtienen dos cosechas por año.
Praderas artificiales. — Los alfalfares producen muy bien y constituyen un gran recurso para los colonos, quienes tienen la venta asegurada de la alfalfa seca, y para los criadores, quienes pueden en un alfalfar de 100 hectáreas engordar cada año 300 animales como mínimum.
Cría de hacienda. — Se sabe que las praderas del territorio, fecundas y abundantes, son de las más favorables para la cría en grande del ganado bovino y asnal y que ofrecen todos los recursos que puede exijir la cría más intensa.
La facilidad del trasporte por agua abre brillantes horizontes á este ramo de la industria pastoril en toda la extensión del territorio. Sus productos encontrarán una salida fácil y segura con precios remuneradores en Buenos Aires, que es uno de los mayores mercados del mundo para la venta de vacunos de raza y de consumo, y Bolivia que necesita grandes cantidades de mulas para los trabajos mineros.
Para darse una idea de la importancia de la cría de hacienda en la Argentina, diremos que este país posee más de 30,000,000 de vacunos, ó sea la cuarta parte más ó menos de los animales de la raza bovina existentes en el mundo.
Creemos inútil decirlo, pues es cosa bien conocida, que la cría, acertadamente dirijida en tierras