Además, guarnecía la Isla un cuerpo de Voluntarios, formado por 14 batallones y con fuerza aproximiida de 6.000 hombres, todos armados con fusil Remington reformado y bala de envuelta niquelada. Al romperse las hostilidades se formaron seis guerrillas mixtas de 100 hombres cada una. Estas guerrillas eran mandadas por oficiales del Ejército. Al reclutarlas se dio preferencia a los licenciados del Ejército.
En San Juan se organizó el batallón de «Tiradores», siendo los empleados insulares y municipales los que dieron el principal contingente. En todos los pueblos se instruyeron guerrillas de voluntarios macheteros, y cada batallón de infantería montó 35 de sus hombres como guerrilla.
Creo estar en lo cierto afirmando que, al mes de declararse la guerra, Puerto Rico tenía 18.000 defensores, de los cuales más de 8.000 eran veteranos, bien disciplinados, y con tal alto espíritu militar que, a pesar de recibir algunas veces trato deficiente, no hubo que lamentar un solo conato de indisciplina.
En el Parque y almacenes, a cargo del cuerpo de artillería, había almacenados 9.000 fusiles Máuser y Remington, y gran cantidad de municiones para los mismos.
Fuerzas de mar.—Las fuerzas de mar consistían en los siguientes elementos de combate:
1. El Isabel II, crucero no protegido de segunda clase, construído en El Ferrol en 1876, de 1.152 toneladas, y un andar de ocho millas. Componían su artille-