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La costumbre era que el hombre joven que deseaba tener familia, primero debía capacitarse en lo que sería su vida de adulto. La vida en una comunidad pequeña de la costa, hacía que mujeres y hombres fueran menos especializados y conocieran diferentes fuentes de sostenimiento familiar, aunque desde luego, la pesca era la base fundamental de su alimentación.

Águila Nocturna acompañó a su amigo, a pescar, cazar, recolectar, tejer, colectar el hule que era sacado de unos árboles especiales, a partir de unas incisiones que se les hacía, para que de ellas, manara una substancia blanca, que después se usaba con fines religiosos y deportivos, pues de este material se hacían las pelotas con que se jugaba el ancestral juego de pelota. La siembra de maíz, Frijol, calabaza y chile, se hacía en menor intensidad, ya que los suelos no tenían una capa espesa de tierra, por lo que se rotaban los lugares de cultivo en cada cosecha, lo que implicaba la roza y la quema, y grandes distancias que caminar y pequeñas extensiones para el cultivo.

Por ello, la comunidad llevaba cada cinco días, sus productos a un mercado local y cada veinte a un mercado regional donde se hacía plaza y se podían intercambiar el pescado salado y el hule, por todos aquellos productos que se necesitaban y que no producía la comunidad.

No existía la noción en el comercio, como una fuente de riqueza. El espíritu del intercambio era satisfacer necesidades primarias, para tener la libertad de entregarse en cuerpo y alma, a la devoción de la Divinidad Suprema, representada en múltiples advocaciones que están relacionadas con la naturaleza. La razón de la existencia era básicamente de carácter espiritual, esto se traducía en manifestaciones religiosas, que saturaban todos los espacios de la vida cotidiana y la forma de expresar esta espiritualidad era a través de “Flor y canto”.

Sin embargo existían un grupo muy reducido de hombres, que a través de una cofradía, realizaban el intercambio de mercancías con tierras remotas y lejanas. Esta acción no era comercial propiamente,

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