Página:De Madrid a Nápoles (1878).djvu/396

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida
366
DE MADRID A NAPOLES

Parma (tan conocida en el mundo político) que ha gobernado aquí hasta el año pasado, en nombre del mayor de sus hijos, Roberto I de Borbon, nacido en 1848.

De esta Princesa elogian los mismos italianos las virtudes privadas y la templanza y el acierto con que ha regido á sus súbditos, asegurándose que sólo altas razones patrióticas (la necesidad de unirse contra el Austria, y el pensamiento de formar un gran reino con tantas flacas monarquías) han podido llevarlos á buscar otro Gobierno. — En cambio, no ha sabido conducirse dignamente en la desgracia, sino que ha hecho lo mismo que los antiguos Duques de Parma desposeídos por Napoleón 1: ha mendigado un trono al César francés; ha reconocido y lisonjeado aun poder popular, enemigo nato del derecho divino; ha arrastrado por los suelos las lises de la casa de Borbon! — Esto se llama no saber morir. — Por odiosos que me sean los enemigos de la libertad y los verdugos de la Italia , yo aplaudiré siempre, aunque no sea más que en nombre de la unidad de acción, del interés dramático y hasta de la dignidad humana, á los vencidos que no se entregan: por ejemplo; al último Duque de Módena luchando en Solferino contra Napoleón III y contra la Italia. — ¡Si- quiera allí había consecuencia, había lógica, había sinceridad! — Cuando el pueblo ha fallado y condenado, el arrepentimiento de los reyes es tardío, y sólo puede contribuir á su mayor mengua. El arrepentimiento debe ser anterior al juicio. Después de la condenación , nulla est redentio. — Los Borbones de Italia se han acordado de ser liberales y patriotas cuando ya no era tiempo. — La Duquesa de Parma debió conocer que , si no sus errores, los de sus parientes, amigos y aliados la habían perdido para siempre. — ¡Además, que su gobierno era absoluto, y se apoyaba cuando era menester en las bayotetas austríacas!...

Pero henos ya dentro de la capital del Ducado. — Dejémonos de historias; consignemos que la población, el territorio, el presupuesto y el ejército del Estado de Parma y Plasencia eran sobre poco más ó menos iguales que los del de Módena , y describamos la antigua corte de los Far- nesio...

Parma es una hermosa y alegre ciudad , de anchas , rectas y limpias calles, rodeada de muros , llena de antiguos palacios y buenas casas modernas, atravesada de Este á Oeste por la Via Emiliana (que se convierte aquí, como en Módena , en una especie de boulevard, con el nombre de Strada-Maestra), y cruzada de Sur á Norte por el rio Parma, sobre el cual hay tres dilatados Puentes.

Siguiendo mi costumbre , he tomado un coche en la Estación , el cual no sólo me ha traído á la Ciudad, sino que me servirá en ella de albergue durante todo el día. En él va mi equipaje: en él escribo: él me llevará á ver todo lo notable que encierra la capital, y él me conducirá á la noche á cualquiera fonda en busca de mesa y cama.— Además de esto,