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Página:Don Diego de Peñalosa y su descubrimiento del reino de Quivira.djvu/59

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DON DIEGO DE PEÑALOSA

Del trabajo principal de este escritor no me ocupo por parecerme muy dudosa la autenticidad de la Relación del padre Freytas y del viaje que describe; no he de pasar con todo, sin noticia, una de las apreciaciones originales con que el Sr. Gilmary Shea exclarece el documento copiado por Buckingliam Smith [1] .

El nombre de Quivira no le parece que procede de ninguno de los dialectos de los indios, y como se aplicaba á la supuesta existencia de grandes reinos, estima debe originarse de la voz arábiga Quevir ó Quivir que tiene la significación de grandeza. Recuerda á este propósito que era familiar á los españoles y la usaban para designar el Uad-al-quivir; Alcazarquivir; Mers-el-quevir, etc., y que es muy posible que Estebanico, el compañero de Cabeza de Vaca, se valiera de tal palabra al hablar de las tierras que había atravesado. Estebanico, á lo que nos cuenta el mismo Cabeza de Vaca, era negro berberisco, natural de Azimor ó de sus inmediaciones, de modo que es verosímil la conjetura; sin embargo, se lee en las relaciones de Pedro de Castañeda de Nájera, que después de atravesar la provincia de Cíbola, visitó otras dos nombradas Tiguex y Quirix, y estas voces, al parecer indias, serán acaso las raices de Teguayo y Quivira.

Pongo en duda el viaje de Peñalosa, porque su narración se presta á observaciones críticas. Por de pronto, es notable la semejanza de las noticias relativas al itinerario, á los ríos, animales, árboles y naciones de indios, con las de las relaciones anteriores de Francisco Vazquez Coronado y Juan de Oñate; en la última no hay nada que no se contenga en las primeras, salvo la personalidad, siendo extraño que tras un intervalo cercano al siglo, coincidieran los puntos de observación sin que el pro-

las de Freytas, O. S. F. With an account of Peñalosa's projects to aid the French to conquer the Mining Country in Northern Mexico; and his connection with Cavelier de la Salle. By John Gilmary Shea. New York: John G. Shea, 1882. En 8.° may. 101 pág. El autor, abogado y literato de los Estados-Unidos de América, es ventajosamente conocido por otras obras históricas, entre ellas The discovery and Exploration of the Mississippi Valley, New York, 1853; History of the Catholic Missions among the Indian Tribes of the United States, 1854; Early Voyages up and down the Mississippi, 1862; The operations of the French Fleet under Count de Grasse, 1864. Ha dirigido la colección de documentos para la historia de las colonias franco-americanas que lleva 24 volúmenes; una serie de gramáticas y vocabularios indianos en otros 15; la Bibliografía de Biblias católicas americanas, y es miembro de las Sociedades históricas de Nueva-York y Pensilvania, y correspondiente de las de Mariland, Massachusetts, Nueva Inglaterra, Iowa, Montreal y varias otras.
  1. El texto que ha tenido á la vista, es, en efecto, copia del nuestro según acredita la nota puesta en cabeza así: True Copies of the transcripts in the Deposito Hidrográfico of the Spanish goberment. Nov.6, 1836, Madrid. — Buckingliam Smith.