Página:Dramas de Guillermo Shakespeare.djvu/211

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido validada
189
MACBETH.
ANGUSS.

Ni borrar de sus manos las huellas de sangre de su oculto crímen. Cada dia le abandonan sus parciales, y si alguno le obedece no es por cariño. Todo el mundo conoce que la púrpura real de su grandeza oculta un cuerpo raquítico y miserable.

MENTEITH.

¿Y cómo no ha de temblar, si en el fondo de su alma se siente ya condenado?

CAITHNÉSS.

Vamos á prestar homenaje al legítimo monarca, y á ofrecer nuestra sangre para que sirva de medicina á la patria oprimida.

LÉNNOX.

Ofrezcámosla toda, ó la que baste á regar el tronco y las ramas. Vamos al bosque de Birnam.


ESCENA III.

Castillo de Dnnsinania.

MACBETH, un CRIADO, SÉTON y un MÉDICO.


MACBETH.

¡No quiero saber mas nuevas! Nada he de temer hasta que el bosque de Birnam se mueva contra Dunsinania. ¿Por ventura ese niño Malcolm no ha nacido de mujer? A mí dijeron los génios que conocen lo porvenir: «Macbeth, no temas á ningún hombre nacido de mujer.» Huyan en buen hora mis traidores caballeros: júntense con los epicúreos de Inglaterra. Mi alma es de tal temple, que no vacilará ni aún en lo más des-