Página:El Pasatiempo.djvu/49

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida


EL MANUSCRITO


DE UN LOCO.



(TRADUCCION DE DICKENS.)



Sí...¡de un loco! ¿Como hubiera herido mi corazon esta palabra algunos años há! Como hubiera despertado el terror que de vez en cuando me acometia, haciendo que la sangre como fuego corriera por mis venas, hasta que el frio hielo del temor en gruesas gotas cubria mi piel, y mis rodillas temblaban de miedo! Ahora me agrada. Es un bello nombre. Mostradme al monarca cuyo iracundo entrecejo tanto intimide como el brillo del ojo de un loco, y cuyo cordel y hacha sean jamas tan eficaces como las garras de un loco. Sí, sí, es una gran cosa estar loco! ser mirado como un feroz leon entre las barras de hierro, y rechinar los dientes y ahullar, las largas y silenciosas noches, á la alegre música de una pesada cadena, y rodar y bramar entre la paja, arrebatado con tan deliciosa armonía. Hurrah por la casa de los locos. Me recuerdo de un tiem­po cuando temia estar loco; cuando me despertaba sobresaltado de mi sueño, y cayendo de rodillas rogaba á Dios me libertara de la maldicion de mi raza: cuando huia de la alegria y de la felicidad y me ocultaba en algun lugar solitario, y pasaba las pesadas horas observando el progreso de la calentura que debia consumir mi cerebro. Sabia que la locura es-