§ CCXXI.
Los hombres que naturalmente son musculosos tienen los huesos muy gruesos, y su proporción por lo regular es corta, con poca gordura; porque como crecen mucho los músculos, se oprimen mutuamente, y no queda lugar para la gordura que suele haber entre ellos. De este modo los músculos, comprimidos asi unos con otros, y no pudiéndose dilatar, engruesan mucho especialmente hácia el medio.
§ CCXXII.
Aunque los hombres muy gruesos suelen ser por lo regular poco altos, como sucede también á los musculosos, sus músculos no obstante son sutiles y delgados: pero entre los tegumentos de su cuerpo se halla mucha grosura esponjosa y vana, ó llena de aire; por lo cual las personas de esta naturaleza se sostienen con mas facilidad sobre el agua que los musculosos, los cuales tienen mucho menos aire en su cútis.
§ CCXXIII.
Al levantar y bajar el brazo se oculta la tetilla y se hincha: lo mismo sucede á los vacíos ó ijadas, al doblar el cuerpo hácia atrás ó hacia adelante. Los hombros ó espaldillas, las caderas y el cuello varían mucho mas que las demas articulaciones; porque sus movimientos son mucho mas variables. De esto se tratará particularmente en otro libro.