El alfil ú oficial, como le llaman algunos, es una pieza muy importante, pues aunque no tiene el poder estraordinario de la reina, ni ofrece él muro sólido de la torre que en los finales es importantísima, ni obra con la travesura y leyes anómalas de los caballos; tiene de ventajoso sobre la reina, que, por valer menos, se arriesga á mas, y que, perdido, deja sucesor; sobre la torre, que está mas en juego que ella, pues sale desde el principio, mientras la torre suele ser pieza defensiva que no toma la ofensiva sino al fin; sobre el caballo, que es mas resistente, que obra desde mas distancia, que recorre mayor estension y que no toma avenidas aisladas, sino líneas ó enfiladas completas. Los alfiles toman nombre del color en donde al principio se asientan, color que conservan hasta el fin; y así se llaman alfil negro y alfil blanco, segun sea de uno ú otro color la línea