Como la naturaleza ha dado términos á la estatura de un hombre proporcionado, pasados los quales ella no cria sino gigantes ó enanos, así tambien debe haber ciertos límites para la extensión que puede tener un Estado, atendida su mejor constitucion, afin de que no sea muy grande para poder ser bien gobernado, ni muy pequeño para poderse mantener por sí mismo. Hay en todo cuerpo político un maximum de fuerza del que no debe pasar, y del qual se aleja quando se engrandece. Quanto mas se extiende el lazo social, tanto mas se relaxa, y en general un pequeño Estado es proporcionalmente mas fuerte que un grande.
Mil razones demuestran esta máxima. Primeramente la administracion llega á ser mas penosa en las grandes distancias, así como un peso es mucho mas pesado en el extremo de la palanca. Es tambien mas onerosa á medida que los grados se multiplican, por que cada Ciudad tiene su administracion la qual paga el Pueblo;