Página:El día del juicio (1919).djvu/22

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página no ha sido corregida
18
 

nos, sí; pero no para los soldados. A los soldados se les suelen dar permisos especiales.

—Eso ya es otra cosa.

Tras estos preliminares, Iarko contó al molinero toda la verdad sobre el Japun, que se lleva cada año un judío. He aquí lo que le contó:

Japun es un diablo judío. Se parece en todo al diablo cristiano; como él, es negro, tiene cuernos y alas; pero sus cabellos caen en largos bucles sobre las orejas, según costumbre de los judíos religiosos, y se toca con el mismo gorrito negro con que se cubren los judíos cuando rezan. Evita encontrarse con los cristianos; en cuanto ve a un cristiano cualquiera, aunque sea a media noche, escapa como un perro miedoso. Pero ejerce su poder sobre los judíos; todos los años se tiene que llevar al judío que elija.

El día designado para esta elección es precisamente el de Iom—Kipur. Mucho antes de que comience el día, los judíos rezan, lloran, desgarran sus vestiduras y hasta se ponen ceniza en la cabeza. Antes de que caiga la noche, se bañan todos en el río o en el estanque, y en cuanto se pone el sol, se dirigen a la Sinagoga. Hasta muy entrada la noche se están oyendo allí sus gritos de dolor; gritan todos a la vez, cerrando los ojos de espanto.

Pues bien, cuando el cielo se ensombrece y aparece en él la primera estrella, Japun sale y empieza a volar por encima de la Sinagoga. Golpea las ventanas con sus alas y elige la vícti-