Página:Ensayo de una historia de Orizaba.djvu/271

De Wikisource, la biblioteca libre.
Esta página ha sido corregida

DE ORIZABA 237

creemos fueron los que diectamente favorecieron sn construccion. Extraños estos hombres extraordinarios á las preocupaciones de sus mismos compatriotas, en disfavor de los indios, no aspiraban á otra cosa, sino á reducirlos por la fuerza sola del sentimiento religioso, tierno para consolarlos, y bastante fuerte y poderoso para mantenerlos en la obediencia y la paz[1]. Eficazmente secundados los indios por aquellos franciscanos construyeron de horcones y paja una iglesia. Esta en realidad fué la que primero se edificó, triste y humilde como no podia ser de otro modo, en 1552 ó 54.

Las prácticas religiosas se limitaban á la misa que cada ocho ú quince dias, se cele-

  1. “A dos horas de camino, despues de pisar la profunda barranca de Metlac y la pintoresca hacienda de Monte-Blanco, se llega á una pequeña aldea situada en una hermosa llanura: se llama Chocaman. A cierta distancia de lo que hoy hace parte del pueblito, divisé unas ruinas; y fuí á examinarlas. Un viejo pasaba por allí y le pregunté si eran restos de alguna iglesia. Simplemente me contestó: ahí estaba convento. Yo me lo sabia ya: el viejo pasó, sin tener mas que decir, pues esas simples palabras encerraban todo cuanto sabia de aquellos escombros. Ni en el curato, ni en el archivo municipal, existe documento alguno que se refiera á este antiguo convento: él, sin embargo, fué bastante importante si juzgamos por la estension que ocupan sus ruinas.” Apuntes de algunas escursiones (del autor) en el valle de Orizaba. Inéditos.